Hugh Grant dio la entrevista más incómoda de la alfombra champán ...

La cosa solo va a peor a partir de ese momento, lo creas o no. Graham le pregunta por lo que más ganas tiene de ver esta noche, él no entiende muy bien de qué demonios está hablando, ella le aclara que se está interesando por sus favoritos y, tras luchar un poco con el concepto, Grant contesta que no piensa en nadie en particular. Muy bien: pasemos, pues, a la pregunta obligatoria para todas las personas que han pasado y pasarán por la alfombra de los Oscar. Hablamos, por supuesto, del “¿Qué llevas puesto hoy?”, aún de moda en pleno 2023.

La respuesta de Grant indica que ya no había modo alguno de que la entrevista acabase bien: “Mi traje”.

Después se explayó un poco más: llevaba puesto su traje y, además, quiso subrayar que se le había hecho su sastre, lo cual sin duda satisfizo la curiosidad de todo el mundo.

Llegados a este punto, solo queda preguntarle a Hugh Grant por una película en la que, como él mismo asegura, sale “como tres segundos”: El misterio de Glass Onion, la segunda parte de Puñales por la espalda. “Pero aún así”, insiste Graham, “apareciste en ella y te divertiste, ¿verdad?”.

“Casi”, sentencia él tras un silencio que parece durar una enternidad.

En ese preciso instante, la entrevistadora (que, en honor a la verdad, podía haberle preguntado por la inminente Dragones & Mazmorras: Honor entre ladrones, en la que realiza algo más que un cameo) decide que ya no tiene ningún sentido continuar con la farsa y corta abruptamente la entrevista, incluso dándole la espalda a Grant. El intérprete, por su parte, se encoge de hombros y eleva las cejas antes de decidir que lo único que puede hacer es marcharse de allí.

Solo hay una cosa segura: el año que viene no vuelve.