Con Zlatan en el banco, el Milan venció al Torino

El Milan venció al Torino por 1-0 este viernes y regresó al triunfo luego de tres derrotas consecutivas en la Serie A. Pese a que el partido se le hizo cuesta arriba nuevamente a los Rossoneri, Oliver Giroud aprovechó un gran centro y marcó el tanto de la victoria para su equipo. Por otro lado, Zlatan Ibrahimovic estuvo en el banco por primera vez tras la lesión que lo marginó ocho meses de las canchas.

Este partido no era nada sencillo para los de Stefano Pioli. Venían de dos caídas por goleada y, la última, por 1-0 en el clásico frente al Inter. De lo que no había dudas es que el Milan debía ganar como sea para recuperar confianza y no alejarse de los primeros puestos de la tabla, y así fue.

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Pero el primer tiempo lo sufrió, porque el que llevaba las riendas del partido era el Torino, que además jugaba con los temores de su rival, obligado siquiera a no cometer ni un solo error. Sin embargo, los de Turín no aprovecharon sus ocasiones y se fueron al descanso con sabor a poco.

Ya en la segunda mitad, el Milan salió con más confianza, valiéndose de estar en el Meazza y con su gente. Tuvo varias chances claras, hasta que a los 61' Theo Hernández lanzó un misil a la cabeza de Giroud, que no desaprovechó el gran centro y marcó el 1-0 de cabeza.

El que miraba desde el banco y se levantaba para aplaudir el gol de su compañero era Zlatan, quien fue convocado por primera vez en la temporada tras la rotura de los ligamentos de su rodilla izquierda. Hasta el momento calmo, contrario a cómo se manifestó en la previa, y, consciente de que era muy pronto para que ingrese al partido, más bajo el contexto en el que lo jugó el Milan.

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Pese a que no ingresó, Ibrahimovic festejó, porque con ese gol de Giroud el Milan se llevó el triunfo y obtuvo tres puntos valiosos para seguir en el tercer lugar de la Serie A. Y una inyección de confianza necesaria para encarar los octavos de final de la Champions League, el próximo martes frente al Tottenham del Cuti Romero.

"Sigo siendo el número 1, Dios. Ahora voy a volver y la música cambiará. La verdad que tengo muchas ganas, quiero hacer muchas cosas por lo que he perdido en los últimos meses. Hay que hablar poco y mostraré mi valor en la cancha", había advertido Zlatan en la previa del encuentro ante el Torino, en diálogo con el medio Sport Mediaset.

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Y escaló incluso un poco más, sobre lo que piensa acerca de quienes lo critican. “¿Crítica? Es normal, porque si no te critican no estás en lo más alto. A mí me critican desde hace 25 años porque soy el número 1, estoy acostumbrado. Si fuera por mí, estaría en una isla con un cigarro. Si puedo ser un ejemplo y un líder, lo haré”, soltó el sueco. En palabras de él, ahora, claro, deberá sostener sus dichos en los próximos compromisos del Milan, que no serán nada sencillos.