Talleres ganó su quinto partido al hilo y es líder en la Liga Profesional de Fútbol

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Talleres no luce pero es utilitario y ahora los mira a todos desde lo más alto de la tabla de posiciones, con el mismo puntaje que Lanús pero mejor diferencia de gol. Sufrió en el arranque del partido pero después se impuso ante Estudiantes con un poco de azar y de la determinación de Auzqui.

El azar y el arquero Herrera le dieron la posibilidad a Talleres de empezar a ganar un partido complicado, en el que la pelota y las mejores opciones de gol en el primer tiempo las tuvo Estudiantes, en especial en los primeros quince minutos del partido.

Primero salvó el arquero de la T ante una arremetida de Apaolaza y luego sacó con el pie un remate de Pellegrini con destino de gol. Enseguida, a los 15 minutos, Rogel se impuso en el área cordobesa pero el cabezazo final salió apenas desviado.

Con poco, el Pincha era mejor en un partido bastante pobre, con muchos pelotazos y sin llegadas. Talleres no tenía la pelota y salvo algunos destellos del Rayo Fértoli, mostró poquito y nada.

Sin embargo, a los 27 minutos, logró la apertura del marcador tras una jugada fortuita. Villagra tomó un rebote fuera del área, en el camino cabeceó Rafael Pérez, desvió Andújar, la pelota pegó en el palo, volvía al campo de juego, dio en la espalda del arquero y se metió. A pesar de las protestas, Pérez estaba habilitado y Tenaglia no se interponía en la visión de Andújar.

Otra vez el azar o mejor dicho las ganas de Carlos Auzqui de seguir en la cancha le permitió a Talleres cerrar la victoria. A los 7 minutos, el Cacique Medina iba a mandar a la cancha a Valoyes por Auzqui, quien no quiso salir. El entrenador apenas respondió con un “ojo” pero lo dejó en la cancha. Y a los 16 minutos, tras un pelotazo largo de Tenaglia, el delantero llegó antes que Andújar, definió por arriba del arquero y aplicó la ley del ex, que, obviamente, no lo gritó. Salió cuatro minutos después.